domingo, 20 de noviembre de 2011

Al diablo la quema


Por: Rudinsky Koradinsy

En Guatemala, "La Quema del Diablo" es una tradición católica de la época navideña, que se realiza el 7 de diciembre, simbólicamente representa el triunfo de la Virgen Inmaculada Concepción sobre Satanás, la victoria del bien sobre el mal.

Su origen data desde la época colonial. Como no existía energia eléctrica, la costumbre de las luminarias o fogatas eran para iluminar el camino de la procesión de la Virgen de Concepción, en vísperas del 8 de diciembre, día de su fiesta.

Dicha situación se popularizó de tal manera que al anochecer, exactamente a las seis de la tarde, se encienden millares de fogatas acompañadas con una exagerada explosión de cohetes que hacen que las calles de las ciudades se llenen de ruido y humo contaminante.

En la actualidad las fogatas se hacen con la creencia de sacar los malos espíritus del hogar, y por ello algunos habitantes queman lo que ya no les sirve: zapatos, ropa usada, chiribiscos, papel, llantas, y hasta basura.

La Quema del Diablo es una tradición muy guatemalteca, sin embargo, es mala costumbre quemar materiales sintéticos y desechos no biodegradables que dañan el medio ambiente. Los gases tóxicos destruyen la capa de ozono y contaminan el oxigeno que nos sirve para respirar. La quema irresponsable causa incendios y trae tragedias no deseables para las familias.

Algunos historiadores sugieren quemar piñatas, tienendo en cuenta que deben hacerse en lugares donde se eviten incendios.

A sacar el diablo que llevamos dentro.

Para conservar la tradición y la salud de nuestras vías respiratorias, sugiero lo siguiente: realizar el 7 de diciembre un acto de purificación espiritual y social; es decir, reflexionar y rectificar nuestros errores y aprovechar ese día para pintar nuestras casas, barrer las calles, limpiar y pintar de blanco los arriates, banquetas y troncos de los árboles. Asimismo llevar los libros usados, cuadernos, revistas y papel que ya no nos sirva, a los centros de reciclaje.

Por la noche, a partir de las 6:00 de la tarde, las comunidades, municipalidades, ó asociaciones de vecinos pueden organizar veladas folklóricas representando el triunfo del bien sobre el mal. Incluso con actos satíricos pueden sacar los trapitos sucios de los funcionarios públicos y denunciar todo lo malo de nuestra sociedad.

Si se realiza esta nueva práctica, evitaremos incendios, conservaremos el medio ambiente limpio, y le brindaremos a la Virgen de Concepción una nueva victoria en su procesión: vencer la contaminación que produce la Quema del Diablo.



Santa Claus


Santa Claus no es el mismo San Nicolás

Por: Rubilio Corado

Jo, jo, jo... es la carcajada de felicidad de un personaje que tergiversa la Navidad. En todas sus películas nos desea Feliz Navidad, pero en ninguna menciona el nacimiento del Niño Dios.

Santa Claus es un gordinflón que obliga a los padres de familia a gastar innecesariamente, y hace infelices a los niños que no reciben juguetes. Sin su vestuario rojo y blanco Santa Claus sería un “obeso bufón de mejillas chapeteadas, gran bebedor de cerveza, barriga de comelón, y nariz de borracho teutón”.

Con tal descripción nos parecería un personaje pagano, y no está lejos, pues su imagen se ha estereotipado como un vendedor de ilusiones en diciembre, producto de la mercadotecnia y publicidad, hoy en día cualquier desempleado puede ser este personaje imaginario, que desplazó a los Reyes Magos.

La leyenda de Santa Claus es una deformación de San Nicolás, Obispo de Myra (actualmente Demre, Holanda) quien vivió en el siglo IV y se distinguió por su espíritu generoso, hasta el punto de, conforme a la tradición, gozaba repartiendo regalos entre los pobres y sólo se disgustaba si estos se lo agradecían. Estas características de nobleza y generosidad lo convirtieron en patrono de los marineros.

En el siglo XI su fama se extendió por el Viejo Mundo, desde el Cercano Oriente hasta las regiones nórdicas. En Holanda por ejemplo, en el siglo XIII, los marineros habían erigido en su honor muchísimos monumentos, fue tanta su popularidad que llegó a ser declarado Protector de los Niños, y desde entonces en Holanda se celebra el 6 de diciembre la fiesta de San Nicolás (por considerar ese el día de su nacimiento). Durante ese día un monje se viste de rojo y barba larga y reparte regalos a los niños.

La fama generosa de patrono, motivo la confección de leyendas que lo consideraban vencedor de Pedro el Negro (el Diablo), quien el 6 de diciembre era encarcelado. Tomando la idea de esta leyenda es creada la versión de Santa Claus, un personaje de manto rojo y barba larga, que cabalgaba por los tejados y arrojaba caramelos por las chimeneas.

Después de quince siglos de antiguedad de la leyenda de Santa Claus, fue hasta el siglo pasado cuando se le dio la vestimenta y la figura que hoy lo caracteriza, ya que antes no se habían precisado, su corpulencia ni vestuario. En ocasiones se le presentaba a la usanza holandesa, llevando una túnica larga de tipo sacerdotal y otras veces se le hacía aparecer en una chaqueta guarnecida de pieles.

Fue en la segunda década del siglo pasado, ya en plena era industrial, cuando el caricaturista norteamericano, Tomás Nast, publicó en la revista Harper’r Weekley la figura rechoncha y jovial que tipifica a Santa Claus. Posteriormente, la imaginación popular, particularmente la infantil, y los efectos especiales de los cineastas de Hollywood le dieron a este personaje poderes especiales, capacitándolo para volar por los aires sobre un trineo tirado por venados y lo hicieron así mismo habitante de una inexplorada región del polo norte, elementos de atracción que superaron y sustituyeron a los orientales Reyes Magos.

¿Superará la navidad de Santa Claus, la Navidad del Niño Jesús?

martes, 25 de octubre de 2011

HALLOWEEN


Corrompido por el poder perdió el temor a Dios, y organizó el crimen: sus armas imponen terror, clona asesinos, convierte zombis en mareros, planifica fugas y motines en las cárceles; con un botón amenaza destruir el mundo. Sus fantasmas censuran e intimidan a los débiles.



Lucifer le dio a la violencia: fama, dinero y un sistema postrado a sus pies. Durante Halloween se disfraza de hechicero, consume drogas, alucina demonios, liba sangre humana y se deleita con orgías.

No murió en un hospital sin medicinas, los derrumbes tampoco aplastaron su cadáver, ni se hizo cenizas por las bombas. No fue linchado, nadie apedreó su cráneo, ninguno lo degolló, descuartizó o le dio el tiro de gracia.


¡Una abeja arrancó sus ojos! Un treinta y uno de octubre de cada año, las sectas satanicas le rinden culto, y los gusanos de su alma pútrida escapan del Purgatorio para entretenernos en el cine y televisión.

¡Esos escalofríos son su presencia!



Raíces paganas de Halloween


*

Por P. Jordi Rivero

La Solemnidad de Todos los Santos es el 1 de Noviembre. Esta fiesta, como todas las solemnidades, comienza la noche anterior. Por eso, a la noche del 31 de octubre se le llama, en el inglés antiguo, "All hallow's eve" (víspera de todos los santos). Mas tarde "All hallow´s eve" se abrevió a "Halloween". Pero, como las celebraciones de un pueblo reflejan su cultura y su fe, Halloween dejó de ser una fiesta cristiana para convertirse en una fantasía de bruja y fantasmas.

Ya desde el siglo VI antes de Cristo los celtas del norte de Europa celebraban el fin del año con la fiesta de Samhein (o La Samon), fiesta del sol que comenzaba la noche del 31 de octubre. Marcaba el fin del verano y de las cosechas. El colorido de los campos y el calor del sol desaparecían ante la llegada de los días de frío y oscuridad. Creían que aquella noche, el dios de la muerte permitía a los muertos volver a la tierra fomentando un ambiente de muerte y terror. La separación entre los vivos y los muertos se disolvía aquella noche y haciendo posible la comunicación entre unos y otros. Según la religión celta, las almas de algunos difuntos estaban atrapadas dentro de animales feroces y podían ser liberadas ofreciéndole a los dioses sacrificios de toda índole, incluso sacrificios humanos.

Aquellos desafortunados también creían que esa noche los espíritus malignos, fantasmas y otros monstruos salían libremente para aterrorizar a los hombres. Para aplacarlos y protegerse se hacían grandes hogueras. Estas hogueras tuvieron su origen en rituales sagrados de la fiesta del sol. Otras formas de evitar el acoso de estos macabros personajes era preparándole alimentos, montando macabras escenografías y disfrazándose para tratar de asemejarse a ellos y así pasar desapercibidos a sus miradas amenazantes. Es el demonio quien en todas las épocas busca implantar la cultura de la muerte.

Al no conocer al verdadero Dios, aquella gente vivía aterrorizados ante las fuerzas de la naturaleza y las realidades del sufrimiento y la muerte. De alguna forma buscaban desahogar su miedo dándole expresión en toda clase de fantasías. Todo lo feo, lo monstruoso y lo amenazante que se puede imaginar en figuras de animales y seres humanos constituye la base para darle riendas libres a la imaginación del terror.

Mezcla con el cristianismo

Cuando los pueblos celtas se cristianizaron, no todos renunciaron a las costumbres paganas. Es decir, la conversión no fue completa. La coincidencia cronológica de la fiesta pagana con la fiesta cristiana de Todos los Santos y la de los difuntos, que es el día siguiente, hizo que algunos las mezclaran. En vez de recordar los buenos ejemplos de los santos y orar por los antepasados, se llenaban de miedo ante las antiguas supersticiones sobre la muerte y los difuntos.

Algunos inmigrantes Irlandeses introdujeron Halloween en los Estados Unidos donde llegó a ser parte del folklore popular. Se le añadieron diversos elementos paganos tomados de los diferentes grupos de inmigrantes hasta llegar a incluir la creencia en brujas, fantasmas, duendes, drácula y monstruos de toda especie. Desde USA, Halloween se ha propagado por todo el mundo.

Algunas costumbres de Halloween

Trick or Treat

Los niños (y no tan niños) se disfrazan (es una verdadera competencia para hacer el disfraz más horrible y temerario) y van de casa en casa exigiendo «trick or treat» (truco o regalo). La idea es que si no se les da alguna golosina le harán alguna maldad al residente del lugar que visitan. Para algunos esto ha sido un gracioso juego de niños. Ultimamente esta práctica se ha convertido en algo peligroso tanto para los residentes (que pueden ser visitados por una ganga violenta), como para los que visitan (Hay residentes que reaccionan con violencia y han habido casos de golosinas envenenadas). En todo caso los comienzos de esta costumbre parece ser que se remonta a la persecución contra los católicos en Inglaterra cuando las residencias de los católicos eran presa de amenazas.

La Calabaza

Según una antigua leyenda irlandesa un hombre llamado Jack había sido muy malo y no podía entrar en el cielo. Tampoco podía ir al infierno porque le había jugado demasiados trucos al demonio. Tuvo por eso que permanecer en la tierra vagando por los caminos, con una linterna a cuesta. Esta linterna primitiva se hace vaciando un vegetal y poniéndole dentro un carbón encendido. Jack entonces se conocía como "Jack of the Lantern" (Jack de la Linterna) o, abreviado, Jack-o-'Lantern. Para ahuyentar a Jack-o-'Lantern, la gente supersticiosa ponía una linterna similar en la ventana o frente a la casa. Cuando la tradición se popularizó en USA, el vegetal con que se hace la linterna comenzó a ser una calabaza la cual es parte de las tradiciones supersticiosas de Halloween. Para producir un efecto tenebroso, la luz sale de la calabaza por agujeros en forma del rostro de una calavera o bruja.

Fiestas de Disfraces

Una fiesta de disfraces no es algo intrínsecamente malo. Pero si hay que tener cuidado de que el disfraz no tape la conciencia del pudor, del respeto a lo sagrado y de la moral en general.

Jesucristo es victorioso sobre el mal

La cultura moderna, jactándose de ser pragmática y científica, se aparta de Dios considerándolo un mito ya superado. Al mismo tiempo, para llenar el vacío del alma, el hombre de hoy retrocede cada vez más al absurdo de la superstición y del paganismo. Sin la fe, el hombre se arrastra hacia la necesidad de protegerse de fuerzas que no puede dominar. Vive con miedo y necesita expresarlo. Busca de alguna manera con sus ritos exorcizar las fuerzas superiores.

Como católicos, profesamos que solo Jesucristo nos libera de la muerte. Solo Él es la luz que brilla en la oscuridad de los largos inviernos espirituales del hombre. Solo El nos protege de la monstruosidad de Satanás y los demonios. Solo El le da sentido al sufrimiento con su Cruz. Solo El es vencedor sobre el horror y la muerte. Solo Dios basta para quién ha recibido la gracia y vive como discípulo de Cristo. Ante Cristo la cultura de la muerte cede el paso al amor y la vida.

Alternativas al Halloween

Los cristianos debemos no solo desenmascarar el mal sino ser además luz en las tinieblas. Debemos abogar por el retorno a la verdadera celebración de la Fiesta de Todos los Santos que comienza en la noche del 31 de octubre. En la liturgia de esa noche, San Pablo nos enseña que los santos están con nosotros:

Vosotros, en cambio, os habéis acercado al monte Sión, a la ciudad de Dios vivo, la Jerusalén celestial, y a miríadas de ángeles, reunión solemne y asamblea de los primogénitos inscritos en los cielos, y a Dios, juez universal, y a los espíritus de los justos llegados ya a su consumación.
-Hebreos 12,22-24

Debemos celebrar gozosamente esta realidad. Se pueden hacer muchas celebraciones en torno a los santos. Los niños se pueden disfrazar de un santo favorito y aprenderse su vida, especialmente sus virtudes, con el fin de imitarlas. Los mayores pueden leer sobre los santos, tener una fiesta en honor a un santo favorito de la comunidad o de la familia.

Tradicionalmente en España y en algunas comunidadse de Latino América, solía irse de puerta en puerta cantando, tocando instrumentos musicales y pidiendo dinero para celebrar misas para las ánimas del Purgatorio.

La Fiesta de Todos los Santos es una invitación a ser nosotros también santos. Las vidas maravillosas de los santos nos ayudan a vivir más perfectamente el Evangelio. Encontramos en ellos grandes amigos que intercederán desde el cielo por nuestra salvación.


Testimonio sobre halloween de una conversa del satanismo

Noticia ACI

Tras convertirse al catolicismo luego de practicar durante varios años el satanismo y el esoterismo, Cristina Kneer de Vidal, residente de Hermosillo, México, explicó que la fiesta de Halloween es la más importante para los cultos demoníacos pues además de iniciarse el nuevo año satánico, "es como si se celebrara el cumpleaños del diablo".

La ex astróloga afirmó que la noche de Halloween no debe celebrarse por ningún católico pues, entre otras cosas, es la fecha en la que los grupos satánicos sacrifican a jóvenes y niños. "No quiero asustar a nadie, todo el mundo es libre de creer lo que quiera, pero mis palabras deben ser tomadas en cuenta, por lo menos pido que me escuchen, razonen y decidan", afirmó.

"Miles de personas han adoptado sin saberlo una costumbre satánica y con ello están propiciando el crecimiento del satanismo en México y en las grandes urbes", agregó Kneer y explicó que "son temas poco conocidos, practiqué la meditación y aunque ahora me arrepiento, llegué a abominar a Dios".

Ritos satánicos

"Se eligen preferentemente niños porque son los que aún no han pecado y son los preferidos de Dios", afirmó.

Hay ocho principales fiestas satánicas: la más alta es la fiesta de Samhain o Halloween del 31 de octubre, en que se celebra el año nuevo satánico (para los católicos es la víspera de Todos los Santos). Luego sigue la fiesta del 21 de diciembre o la fiesta de Yule (cercana al día de la Navidad); el 22 de febrero se celebra la fiesta de Candlemas o festival de Luces. La siguiente fiesta en el calendario es el equinoccio de primavera, generalmente se hace el mismo día de la Pascua burlándose de la muerte de Jesús en la Cruz y la fiesta se distingue por un sacrificio similar.

Conversión

Cristina Kneer pertenece a un grupo conocido como SAL, que pretende enviar a los satanistas un mensaje de esperanza para que se conviertan y la petición de que no hagan más daño.

"Cualquier satánico que lea esta información y que quiera rechazar o abandonar el satanismo puede hacerlo con ayuda de Dios, como ya lo hemos logrado nosotras", señaló Kneer.

La dirección del grupo de ex-satanistas es el apartado postal 50, delegación 6, en Hermosillo, Sonora, Mexico.

Lea el documento en completo:

HALLOWEEN, ¿Cómo lo enfrenta un cristiano?